El joven actor Robert Pattinson, que saltó a la fama de Hollywood con su papel de Edward Cullen en la película Crepúsculo, es una de las estrellas más fotografiadas de la actualidad. Cuando se encuentra a las puertas de finalizar el rodaje de la secuela de Crepúsculo, Luna Nueva, se pasea por Cannes, en un día soleado.
Momento en el cual se puede comprobar el gran contraste de su piel sumamente pálida, perfecta para su papel de vampiro en la adaptación de la saga literaria surgida de la pluma de Stephanie Meyer.
Y es que sin duda que el joven actor encontró un papel ideal para lanzar su carrera. Garantizándole nada menos que cuatro películas en las que poder saciar a sus miles de fans de todo el mundo. Aunque seguramente que muchas desearían que en vez de cuatro fueran cuatrocientas…
Robert Pattinson atendió gustosamente a los medios, y eso que el sol de Cannes caía de plano en un espléndido día en la costa azul francesa. Las fans parece que “huelen” su rastro y aparecen en casi cualquier lugar público en que se encuentre. Ya sea en auditorios, restaurantes o aeropuertos. Pero ¡no hay problema!, Rob siempre tiene tiempo para atender adecuadamente a sus fans. Ya sea fotos, autógrafos e incluso algún que otro achuchón. Pattinson parece que lleva bien lo de la fama. Tal vez el secreto esté precisamente en ser famoso pero sin creérselo demasiado.
Robert Pattinson presentará, junto con Kristen Stewart y Taylor Lautner, un clip promocional de la película Luna Nueva, dentro de la gala de entrega de los MTV Movie Awards 2009, que tendrán lugar el próximo 31 de mayo en la ciudad de Los Ángeles.
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